En la ciudad de Enugu, en la exótica Nigeria, la joven Kambili, de quince años, y su hermano mayor Jaja llevan una vida privilegiada. Su padre es un poderoso y respetado hombre de negocios, viven en una bella casa y van a un colegio religioso de élite. Pero, como Kambili revela en su relato con voz tierna, su vida familiar dista mucho de ser armoniosa. Su padre es también un fanático católico que ha dibujado unas expectativas imposibles de cumplir para su familia, a la que castiga con crueldad si no actúa de acuerdo con lo que él considera la perfección evangélica. Solo cuando tiene noticia de otros modos de vida Kambili adquiere conciencia de la oscuridad y violencia del suyo. La cariñosa y atrevida tía Ifeoma convence a su hermano para que deje a sus sobrinos visitarla en Nsukka. Una vez en el humilde apartamento de su tía descubren un mundo totalmente nuevo, gobernado por la calidez, el respeto a las ideas, la libertad, la ausencia de castigos... Gobernado, en fin, por el amor. Cuando un golpe militar sacude el país y Kambili y Jaja vuelven a casa transformados por la libertad conquistada, la tensión familiar crece de forma alarmante. Jaja ya no está dispuesto a bajar la cabeza y Kambili tendrá que encontrar la fuerza necesaria para defender a sus seres queridos.