Oráculo manual y arte de prudencia, de Baltasar Gracián, vio la luz en Huesca en 1647. El tratado ofrecía trescientas máximas sucintamente comentadas sobre cómo prosperar en una sociedad en crisis mediante la prudencia, la sagacidad y la sabiduría de la experiencia. Este «arte de vivir», que extendía los valores de la nobleza a todos los individuos letrados con independencia de su estamento, se anticipó a los postulados del Siglo de las Luces. A la extraordinaria difusión de este manual laico de filosofía moral contribuyó en buena medida el éxito de su traducción francesa en una época en que el francés era la lengua de cultura en toda Europa. Marc Fumaroli reconstruye en este ensayo el contexto en que fue concebida, publicada y recibida la obra de Gracián y su versión francesa tras la Reforma, una época de fractura entre razón y fe que escindió la inquieta conciencia de Europa.