La España Medieval es una presentación de las grandes líneas que configuran el proceso histórico de las tierras hispánicas desde la caída del Imperio Romano hasta los albores de la modernidad, que coincidió en España con el reinado de los Reyes Católicos. El libro parte de la España visigoda, un reino semejante a los que por aquella época se construyeron en el occidente de Europa sobre las ruinas del Imperio Romano. En el siglo VIII, la invasión musulmana supuso un giro espectacular. Desde ese momento la mayor parte de la vieja Hispania romana entró a formar parte de al-Andalus, escapando del dominio musulmán únicamente la franja montañosa del norte, en donde se fueron construyendo los núcleos cristianos de resistencia. Este panorama subsistió en lo fundamental hasta mediados del siglo XI, en que se produjo la caída del Califato de Córdoba y la fragmentación de al-Andalus en un mosaico de reinos taifas. A partir de esas fechas los cristianos tomaron la delantera, ocupando paulatinamente los territorios de al-Andalus, que a mediados del siglo XIII habían quedado reducidos al reino nazarí de Granada. Así las cosas, a partir del siglo XI se pone especial énfasis en el desarrollo de los núcleos políticos cristianos, tanto en sus aspectos económicos y sociales como políticos y culturales. No obstante, siempre está presente la comunicación entre las tres culturas que coexistieron en el Medievo hispano: la cristiana, la musulmana y la judaica.