Siglo II d.C. Meses antes de su muerte, el emperador Adriano que sabe por sus médicos de la inminencia de su final, se presenta en los aposentos de su esposa, la emperatriz Sabina, conminándola a suicidarse antes de ser ejecutada por él, tras haber descubierto un terrible secreto en el que ella está involucrada. Sabina acata la imposición y llama a quien ha sido su confidente durante los últimos años, Julia Balbila, para hacerla partícipe de su vida y razones. Obligada a casarse a los once años con su primo para afianzar la dinastía hispánica en Roma, la emperatriz es una mujer fuerte e infeliz; noble, no sólo por su ascendencia, sino por su manera de enfrentar su destino funesto. La novela, un mosaico de los reinados de Trajano y Adriano, es una historia de odios íntimos, de pasiones y conjuras con el poder imperial de fondo.