Narrada en primera persona, con una crudeza y una asombrosa maestría, esta novela destaca con fuerza en el panorama literario actual, tan escaso de libros interesantes y de temáticas no trilladas. Gracias a este libro vuelve la indignación que produce recordar a los miles de españoles que murieron inútilmente en 1921 en la Guerra de Marruecos.