El viaje del príncipe Takaoka es una fascinante fábula budista ambientada en el siglo IX. Su protagonista es el príncipe Takaoka, que emprendió un largo peregrinaje hacia la India en la recta final de su vida. Si bien el príncipe Takaoka fue un personaje real que realizó dicha expedición, el relato de su viaje se encuentra muy ficcionado.

La figura del príncipe Takaoka es muy interesante: fue miembro de la familia imperial japonesa, pero también fue monje budista durante la mayor parte de su vida. Fue ya en su madurez cuando se propuso realizar este viaje, junto a dos monjes y un joven que se unió al peregrinaje por pura casualidad.

A lo largo de su camino hacia Tenjiku se encuentran con gentes y seres únicos, como unas extrañas criaturas que se alimentan de los sueños de las personas o unos singulares hombres con cabeza de perro. También descubren a los amenazadores hombres sombra, o ciertas niñas nacidas de un huevo que tienen un especial talento para la danza.

En las páginas de esta fábula, realidad y sueños se encuentran íntimamente entrelazados. No en vano, su protagonista es un gran soñador. En cierto pasaje de la obra le dicen al príncipe que su mente siempre está en otro lugar, en un lugar lejano. Es una excelente manera de describir la especial idiosincracia del protagonista.

El viaje del príncipe Takaoka está considerada como una obra maestra del budismo y fue galardonada con el prestigioso premio Yomiuri en el año 1987. Tatsuhiko Shibusawa nos adentra en un viaje, tanto físico como espiritual, en busca del nirvana. Se trata de una obra única e inolvidable. (Ana Rayas, 2 de diciembre de 2025)