Creo que este libro está sobrevalorado, los nueve relatos están impregnados de tristeza , de melancolía, de desarraigo pero la manera de narrar no me ha convencido. Solo me han conmovido dos :”Una anomalía temporal” y “Cuando el señor Pirzada venía a cenar” .Otros como “Un durwan de verdad” y “El tercer y último continente”, dan vueltas a lo mismo con una narración tipo crónica distante hasta el final que si sorprende un poco y el resto tienen un estilo tan frio, soso y plano que no me han enganchado en ningún momento.
hace 3 años