Una brillante y triste reflexión sobre el matrimonio y los sentimientos. Su autor, recuperado para la historia de la literatura, fue miembro de la generación de Scott Fitzgerald y, como el autor de El gran Gatsby, describió con agudeza y humanidad aquellos años poblados por millonarios sin escrúpulos morales, matrimonios desavenidos y aristócratas aburridos y caprichosos. Todos ellos envueltos en una atmósfera trágica.