Delicioso divertimento literario que reúne todo un catálogo de personajes y de anécdotas cuyo denominador común es su relación con el protagonista: Alfgrimur es un muchacho que, abandonado por su madre al nacer, crece con su abuelo, Bjórn, un pescador que se niega a variar el precio del pescado ignorando la ley de la oferta y la demanda. En su casa, a las afueras de Reikiavik, conocerá a una asombrosa colección de excéntricos, desde capitanes de guardacostas hasta especialistas en fosas sépticas. Laxness (Premio Nobel de Literatura 1955), haciendo recordar a Dickens, comienza su divertido collage de temperamentos, con este párrafo inolvidable: "Un sabio afirmó que, aparte de perder a su madre, para un niño no hay nada más sano que perder a su padre. Aunque lejos de mi suscribir en su integridad estas palabras, lo cierto es que también sería el último en rechazarlas de plano."