Impresionante. Por un lado, poniéndonos en la piel de nuestras abuelas - madres, en una época no muy lejana que no debemos olvidar y debemos estar agradecidas a la situación actual, pese a que hay que seguir consiguiendo avances y por otro lado, historias de desamor y sobretodo amor que terminan triunfando. Gracias una vez más paloma Sanchez-Garnica por hacerme disfrutar con esta maravillosa historia¡¡
hace 2 meses