Resumen

Eric tenía todo lo que podía desear un hombre: una mujer, un hijo, un hogar. Pero cuando el crimen y la sospecha llaman a su puerta, descubrirá que no conoce a nadie... ni siquiera a los que más quiere. La pequeña Amy, hija del frutero del pueblo, ha sido secuestrada. Y el principal sospechoso es Keith, el hijo adolescente de Eric. La presión policial y las elusivas miradas de los vecinos dan pronto paso a algo mucho peor: una duda que crece como un cáncer en el alma del propio Eric. Un sentimiento voraz y espantoso que alcanza no sólo a su hijo, sino a los recuerdos de su propia infancia, que esconden un terrible secreto que nunca ha querido ver.