Es una historia bastante peculiar, sobre todo por las situaciones que rodean a la narrativa. A mí personalmente me cautivó la forma de escribir del autor.

Una joven pareja de clase alta recibe una noche en su casa, en la ladera de un monte del Cantábrico cercana al mar, la visita de un desconocido, que dice ser primo de él, junto a su acompañante. Alojados en la vivienda tras asegurarse el protagonista de que la relación de parentesco existe pese a que él la ignoraba, la presencia de los extraños se prolonga más de lo esperado haciendo a los anfitriones indagar sobre qué les motiva a estar allí hasta el punto de espiar sus salidas por el pueblo. Como elemento que sobrevuela la historia (y en este caso nunca mejor dicho), una congregación de ufólogos hace vigilias en una pradera cercana esperando avistamientos de extraterrestres. Así, Bilbao consigue con los ovnis la metáfora perfecta de esos extraños que vienen a perturbar la rutina de los inesperados anfitriones. Como suele ocurrir con las novelas simples en su planteamiento, su reducida extensión juega a su favor para no provocar en el lector el hastío de una obra alargada innecesariamente. www.antoniocanogomez.wordpress.com

Es mi primera vez con este escritor y me ha dejado con ganas de experimentar más, porque es lo que he sentido al leer este libro, una experiencia extraña. La trama ya lo llena todo de misterio y según va avanzando más misterio crea, todo desconcierto y una especie de rareza muy atípica que no suelo encontrar en las novelas habituales, eso es lo que me ha invitado a seguir con este escritor, por su originalidad y lo bien que construye el ambiente de la historia. Los personajes invitan a empatizar porque son tan normales y reales como la vida misma, ambas parejas con personalidades y características bastante comunes dentro de lo que cabe, pero con cierto misterio y eso hace que la historia en sí se trasforme y te haga mantener la atención hasta el final, porque es un libro finito, con mucha ligereza y con capítulos cortos. Todo lo que ofrece este libro es en su justa medida, sin paja, sin demasiadas extravagancias, sin esa sensación de que deberías estar leyendo otro libro mejor y de esos que se terminan rápido y quieres más porque no has encontrado nada que te haya parecido que sobra.

Interesante y corto libro, que se agradece, en el que hay extraños por partida doble, humanos y alienígenas, o al menos de estos últimos se intuye.