Las tierras blancas es la obra capital de Juan José Manauta. Según el propio autor, esta novela, publicada en 1956, refleja “el éxodo de los campesinos entrerrianos y el desarraigo de estos trabajadores de su tierra, corridos por el latifundio y la miseria”. Estructurada casi musicalmente como un contrapunto narrativo entre Odiseo, el hijo, y su madre, Las tierras blancas sitúa a sus inolvidables personajes en el ámbito hostil de las tierras baldías, blancas, comidas por la erosión del río Gualeguay.