El autor cae bien. Porque se agradece el sentido comun, la sencillez y la honradez en los planteamientos sobre la gobernanza en general. Y eso es lo que nos encontramos en este libro que aplica recetas sencillas para que este pais funcione mejor. Creo que el autor vive algo de las rentas de su anterior exito sobre la Crisis, ya que aqui tampoco encontraremos ni grandes enseñanzas ni grandes sorpresas. Tampoco creo que el Sr. abadia lo haya pretendido. Tan solo conecta con una gran mayoria, y eso lo explota en este libro. El libro se lee con placidez y una media sonrisa permanente, aunque los problemas de fondo que plantea sobre España no son realmente para tomarselo a risa. Me quedo con los valores que transmite
hace 9 años