Cuando lo leí a mis 23 años lo califiqué de obra maestra, en una segunda lectura ya sobre mis 40 vi que quizá lo había mitificado, pero le pongo un 8!

Una novela rara, rara, entre surrealista y realismo mágico, con unos personajes inocentes y conscientemente sencillos, con comportamientos sencillos, sentimientos sencillos. Para los devotos de Vian

Encantadoramente surrealista, si entras en su mundo te cautiva sin duda.

Unos de los mejores libros que me he leido en mi vida. Una historia surrealista romántica que destila encanto en todo momento. Muy buena la evolución del ambiente de la novela. Queda al final un regusto melancólico muy dificil de explicar. Absurdos y estúpidos son algunos comentarios que veo por aquí...

Una gran decepción después de esperar algo parecido a Escupiré sobre vuestra tumba. Un sintentido tal que me hizo terminarlo más por cabezonería que por otra cosa.

El absurdo y el existencialismo de Kafka nada tiene que ver con lo que ha escrito Vian, y por desgracia tampoco su calidad literaria y la fuerza de sus argumentos, por lo menos en este relato.
La base de la novela: las historias de amor y amistad, me han parecido muy “comunes” literariamente hablando, y poco desarrolladas. Pues creo que el alma de la historia está en las imágenes oníricas, o se las puede denominar absurdas, o disparatas, o bufonadas, o chorradas, etc. Me inclino a creer, que es una tomadura de pelo por parte del escritor.
Yo por mi parte estos delirios no me lo he tomado en serio (reconozco que algunos son divertidos), no creo que puedan tener interpretación o sentido la mayoría de estas fantasías. Lo único que me ha gustado es la parte crítica que hace a la religión, el trabajo y la parodia a Sartre.
Y si bien me ha gustado “este palo” a la religión, las escenas de la boda y el entierro son de las más demenciales, paranoicas, incompresibles y absurdas que he podido leer.

Un libro rarísimo. No sé si me ha gustado o no. Hay situaciones muy absurdas que no tienen ni pies ni cabeza pero que ejercen un efecto hipnótico y sigues leyendo para ver que barbaridad va a seguir contándonos el autor. Al menos esta ha sido mi experiencia con este libro.

Es un libro que deja bastante que desear respecto a lo absurdo que es, pero a mi, de tan absurdo que es me ha resultado hasta entretenido, divertido e interesante, si quito el final, que es bastante estúpido.

Un sin sentido de libro, por llamarlo de alguna manera, es estúpido, zafio y a lo único que invita después de leer las 50 primeras páginas es a dejarlo como me ha tocado hacer a mi. No lo he acabado y por eso no lo voy a puntuar, pero de haberlo hecho le hubiera plantado un cero.