Muy buena, lo primero que leí de Xavier

Te dan ganas de ir a Estambul. Buena novela, con giros muy logrados.

Estambul como marco para la extraña historia de un espía que pasa penalidades para llegar a fin de mes. Escrita en primera persona, te mete en un mundo sin hacerte saber quién es el protagonista realmente hasta el final. Muy densa, compacta y angustiosa.

Leí el libro IBIZA del mismo autor y me lancé a por este. Lo he devorado el fin de semana de Halloween. Es tan diferente de Ibiza ! Es como si estuviera hecho por otro escritor. Relato en primera persona de un espía griego en Estambul donde nadie es lo que parece. Me fascina que según la bio de Xavier Molina haya vivido en Turquía. La verdad es que todo suena muy verídico y la trama te atrapa. Lo recomiendo para amantes de historias tortuosas.

La novela está narrada en primera persona, tal y como la explicaría el mismo agente. Esto tiene varias consecuencias. La primera es que te obliga a ponerte en su lugar, deseando que escape con vida, pero a la vez te planteas si ese deseo es lícito dado que no es un héroe, sino más bien lo contrario. La segunda consecuencia es que la novela es pura narración. Prácticamente no hay descripciones y bastantes diálogos, lo que hace muy fácil leerla. Los personajes principales están muy bien dibujados y los hechos narrados, al estar basados en acontecimientos que ocurrieron de verdad, parecen versiones "B" de los hechos tal y como los conoció la opinión pública. El ambiente de Grecia y Turquía de la última década de los 90 del siglo pasado también se muestra de forma muy detallada y dado que la situación actual de Turquía deriva de ella es interesante ver cómo se originó. La novela anuncia una segunda parte donde tal vez se aclaren algunos puntos que se narran de forma muy general, con lo cual entendería la precipitación en cerrar capítulos, personajes y sub-historias. Una novela de espías muy entretenida y que parece real, bastante alejada de otras historias basadas en los mismos personajes donde todo parece discurrir por la vías de la ultra tecnología y el dominio de la situación.