El libro reúne doce historias de nítida escritura, sentido del humor paradójico y un estilo directo, con una técnica que hoy llamaríamos avant la lettre, cinematográfica. O. Henry (seudónimo de William Sidney Porter) decía que en Nueva York hay cuatro millones de historias, las de sus cuatro millones de habitantes: desde el amor -o más bien la dura conquista de la mujer- al negocio del heroísmo, desde el periodismo a la caballerosidad sureñas, las "leyes" capitalistas de la oferta y la demanda o los indios "civilizados" que estudian griego y sólo arrancan la cabellera de sus contrincantes en los partidos de fútbol americano, sus narraciones cargadas de humor y de un enorme pragmatismo nos cuentan hechos insólitos en las vidas de gente corriente. Desde 1919 el O. Henry Award es el premio más prestigioso de Estados Unidos para relatos breves. Entre sus ganadores se cuentan narradores como William Faulkner, Dorothy Parker, John Updike, Truman Capote o Raymond Carver.