Una novela negra con todos los ingredientes del género: un protagonista algo apartado del sistema, giros argumentales, algo de retrato y crítica social. Un libro que se lee de un tirón.
hace 12 añosUna noche aparece un cadáver en un observatorio de las colinas de Hollywood. Aparentemente, se trata de un asesinato común, por lo que el detective de policía Harry Bosch se hace cargo del caso. No obstante, pronto se descubrirá que la víctima, Stanley Kent, trabajaba en el sector clínico y tenía acceso a sustancias radiactivas. Esto convierte un simple homicidio en un asunto de terrorismo. El FBI toma las riendas y empieza una carreta contrarreloj para encontrar a los culpables, pues saben que tienen sustancias peligrosas en su poder y pueden hacer uso de ellas -y provocar una masacre- en cualquier momento. Rachel Walling, agente del FBI y ex pareja de Harry Bosch, pondrá las cosas muy difíciles al detective, pero éste seguirá su instinto y se dará cuenta de que en este caso absolutamente nada es lo que parece.
Una novela negra con todos los ingredientes del género: un protagonista algo apartado del sistema, giros argumentales, algo de retrato y crítica social. Un libro que se lee de un tirón.
hace 12 añosEl hallazgo de un cadáver en un observatorio en Hollywood provoca una precipitada búsqueda de material radiactivo desaparecido al que tenía acceso la víctima. El caso, inicialmente jurisdicción de la policia de Los Ángeles, despierta el interés del FBI, que toma las riendas de una investigación a contrarreloj. Es precisamente el choque entre los agentes de la policía y el FBI uno de los aspectos más atractivos de la novela. Centrada en unas pocas horas de investigación trepidante, se lee de manera rápida y sin perder el interés.
hace 13 años