El terror no se trata de asustar al lector sino de crear una sensación de angustia constante durante toda la lectura. Este es el ejemplo de una novela que te tiene aterrado todo el momento, ya que mientras el protagonista va menguando cada vez se le va haciendo mas difícil adaptarse a su nueva vida. Las diferentes pruebas que va pasando, con un gato, con una araña, sabe que lo que consiga un día con esfuerzo le va a ser imposible dentro de una semana al reducirse todavía más su tamaño y eso es lo que agustia a cualquiera.
hace 9 años