Una novela emotiva, que deja entreve cuan tan difícil es para nuestros jóvenes e incluso a los propios adultos saber -por decirlo en palabras corrientes- para que somos buenos en esta vida, que es a lo que vamos a dedicarnos, que es lo que nos mueve en este mundo, que es lo que realmente nos apasiona. Hay quienes corremos con una suerte especial como Pedro -uno de los personajes principales de esta novela- y hayamos en nuestro camino a personas que nos ayudan a descubrirnos a nosotros mismos, a entender el mundo, a ser mas humanos, y perceptibles a cualquier cambio y detalle. Habla de algo muy importante que es el hecho de envejecer a causa del conocimiento, esa ambición de conocer, de leer, de estudiar, de superación etc. te envejece, y sucede por que tu cerebro, tu análisis, tu corazón, tu enfoque crece, madura y por tal envejece. Eso es lo que le enseña el profesor Nabuco a Pedro, quien pasa por una crisis existencial. Yo también tengo mi propio profesor Nabuco y me ha enseñado lo mismo que este hermoso libro, si bien no con la mismas palabras pero el sentido es el mismo. Otro libro que me hace llorar por asociación.
hace 9 años