Publicada en 1920, y redescubierta en Alemania en 2017, esta novela causó un enorme impacto literario por su carácter de autoficción, sinceridad radical y su "nuevo objetivismo", que la hacen precursora del existencialismo. También cierta dosis de escándalo al recrearse la autora en su episódico ejercicio de la prostitución.