Me gustó, dentro de los buenos de la serie. Destaca porque en esta ocasión el conflicto del protagonista no radica en convencer y conquistar a su compañera cuando la descubre, sino que por el contrario, su relación comienza a surgir espontánea y fluidamente desde su primer encuentro. El conflicto viene de la mano de aceptar a la familia de su compañera, un grupo de carpatianos que hace siglos se separó de su especie y no conoce las costumbres de éstos, así como de su lucha interna con la marca que le hizo un vampiro siendo un niño y que lo obligó a separarse de los suyos. Solo me hubiera gustado que al final, la autora nos hubiera regalado el reencuentro de Julian con su propia familia.
hace 9 años