EL CRIMEN DEL GANADOR (Trilogía del ganador #2)

EL CRIMEN DEL GANADOR (Trilogía del ganador #2) RUTKOSKI, MARIE

Portada de EL CRIMEN DEL GANADOR (Trilogía del ganador #2)
Nota media 7,67 Muy bueno 3 votos 1 críticas

Resumen

La boda de un miembro de la realeza es el sueño de muchas chicas. Implica una celebración tras otra: bailes, fuegos artificiales y diversión hasta el amanecer. Pero para Kestrel significa vivir en una jaula en la que ella misma se ha metido. A medida que se aproxima la fecha de la boda, anhela contarle a Arin la verdad sobre su compromiso: que accedió a casarse con el príncipe heredero para que él pudiera ser libre. Pero ¿puede confiar en él? ¿Acaso puede confiar en sí misma? Kestrel está convirtiéndose en una maestra del engaño. Ha empezado a hacer de espía en la corte. Si la descubren, su país la considerará una traidora. Sin embargo, debe encontrar el modo de cambiar su despiadado mundo… y, en el proceso, está a punto de descubrir un espeluznante secreto.

1 Críticas de los lectores

10

Si sufrí hasta lo indecible con el primer libro, nadie me preparó para éste. La historia de Krestel y Arin es desgarradora. La autora zarandea nuestros sentimientos de forma despiadada. Acabo de terminarlo y ya tengo en mis manos el tercero, porque, simplemente, no soporto quedarme con ese final, me supera. Una de las cosas que me ha encantado, tanto de éste como del primer libro, es que la autora no desperdicia ni una página; cada hecho, recuerdo o conversación, por nimio que parezca al momento de leerlo, tiene enormes repercusiones en los capítulos siguientes. Ahhhh! Y los personajes... perfectos, principales y secundarios… todos magníficos, para bien o para mal. Sin duda, Kestrel es mi favorita, tan dividida entre lo que debe y quiere hacer. Su relación con Arin sigue siendo tan frágil, sobre todo porque nunca han podido sincerarse, siempre vigilados, siempre con miedo a ser descubiertos y ponerse en riesgo ellos y al pueblo herraní. Todo lo que tienen es su propia intuición respecto de lo que siente el otro, pero aun así tan fuerte.

hace 7 años