Sentí la necesidad de gritar "Socorro" varias veces... Lo leí atraído por haber ganado el Premio Francisco Casavella; madre mía, si Casavella levantase la cabeza. ¿Cómo se puede cometer tal ultraje en su nombre? Ultraje a la literatura, ultraje al mundo del libro, ultraje a la tradición editorial... Con mis disculpas al autor por la franqueza pero, honestamente, creo que le sobra pedantería, pretenciosidad y candidez, mientras que le falta... de todo, le falta de todo: madurez, conocimiento, oficio, talento... Parece como si el autor aún no hubiese vivido, como si careciese de experiencia vital y solo hubiera conocido unos cuantos lemas y tópicos. Por eso hablaba de "candidez": se introduce en el mundo de la empresa y la política sin tener ni la más pajolera idea de esos dos mundos complicados que él convierte en totalmente banales. No daré más detalles porque ni vale la pena. Llegué al final en la esperanza de encontrar un motivo para el Premio y el final fue, si cabe, todavía peor que el inicio y desarrollo... Podría dar ejemplos de horror literario pero no vale la pena ensañarse.
hace 4 años