Es de estos libros que no puedes dejar de leer. La trama es brillante. Y el desarrollo de la historia amorosa entre el protagonista y su "dulcinea" es sencillamente una obra de arte. Se adapta muy bien a la sociedad y problemas contemporáneos. Aunque los saltos en el tiempo pueden llevar a la confusión, trasmiten una incógnita constante que hace que el libro sea más adictivo. A mi particularmente me encantó. Prueba de ello el 8 que le he dado.

Lo mas trabajado y sorprendente de la novela es su singular protagonista, que te llega a cautivar, y tambien su especial historia de amor adolescente. Por otra parte, mantiene bien la intriga y el suspense, pero no me ha gustado el ritmo, con saltos en el tiempo y el espacio muy seguidos, que a veces resultan confusos, y además, insiste innecesariamente en describir las numerosas aperturas de las cerraduras y las cajas fuertes, que llegan a resultar monótonas. Acabas aburriendote de los pernos, los diales, los tensores y las diferentes combinaciones de números, que se repiten excesivamente a lo largo de toda la novela, ralentizando la historia.

Un libro que da la sensación que va a terminar como todos nos esperamos, pero si lo coges con ganas te logra sorprender, hasta que te enamores del protagonista, todo un héroe.