William Burroughs es una figura capital dentro de la vanguardia artística y del pensamiento crítico de la segunda mitad del siglo XX. La prolífica leyenda de su pasado, el contenido escatológico y brutal de alguna de sus novelas, los diversos secuestros y procesos legales de su novela escándalo, El almuerzo desnudo, o el efecto dispersante y caótico de sus métodos narrativos han contribuido a difundir una imagen tópica, entre monstruosa y demoniaca, de Burroughs, de su propósito como escritor y de la finalidad de su universo novelístico.El lugar de los caminos muertos, febril, desconcertante, mordazmente divertida y brillante, constituye quizá el discurso más exaltado de Burroughs. Erótico y violento, lleno de imágenes alucinatorias, es un western surreal que involucra al lector en la cruzada de un pistolero, Kim Carsons, que pretende organizar el planeta Tierra según su propia idea de la cordura. Es una obra enraizada en el lado más oscuro de la imaginación americana; su territorio real es el caos del inconsciente.