Este es el primer libro que leí de Joel Dicker y me gusto tanto (PERO TANTO) que le siguieron “la desaparición de Stephanie Mailer” y “la verdad sobre el caso Harry Quebert” así que lógicamente es un libro que tiene que estar en tu biblioteca. Marcus Goldman es un conocido escritor que se dirige a Baltimore (su ciudad natal) a pasar el último día de libertad junto a su primo Woody, antes de que aquel ingrese en prisión. Una vez emprende el regreso, recibe una llamada de su tío, quién le confiesa que algo muy grave está a punto de suceder. Mientras acompañamos a Marcus Goldman en la develación y comprensión de la misteriosa llamada, vemos como secretos de la historia familiar (que durante mucho tiempo se mantuvieron ocultos), salen a la luz. Centrado en la historia de una familia que encarna el sueño americano, que vive en mansiones de lujo, vacaciona en lugares paradisiacos y vive la vida añorada por muchos, esta novela nos enseña que muchas veces nada es lo que parece, dando lugar a la tan conocida frase “no todo lo que brilla es oro”. En este tipo de libros, no resta más que sentarse, disfrutar de una buena lectura y agradecer que todo lo padecido por los personajes, no nos esté pasando a nosotros mismos.
hace 3 años