Qué gran manera de escribir que tiene Borges, es muy particular y llamativo. Las interpretaciones que se pueden hacer de los relatos son variadas, muchos no cierran una idea concreta y en mi opinión toda la obra, al igual que en otras de Borges, es una gran metáfora en busca de lo absoluto. A decir verdad, no es el que más me ha gustado del autor, aunque la realidad es que es para releerlo varias veces.
hace 1 mes