J.D. Baker, un autor que no olvidaremos después de adentrarnos en las páginas de El Cuarto Mono, un thriller que da una vuelta de tuerca a las historias de este género. Nominado a diversos premios, entre ellos el Bram Stoker, ha sido elegido por los herederos de Stoker para coescribir la precuela de Drácula, hecho que denota que sus narraciones y sus tramas han calado hondo y generado expectación. Puede resultar difícil aportar elementos nuevos en un género extensamente leído y prolífico, pero J.D. Baker consigue introducir su marca y crear una historia tan intensa como novedosa. Chicago. Un detective de Homicidios con varias pérdidas personales a su espalda. Un tétrico e ingenioso asesino en serie que tiene en jaque a la policía. Pueden sonar a cliché los ingredientes, pero lo importante no son los ingredientes en cuestión, sino cómo los usas para elaborar el producto final. Y el autor ha conseguido crear una historia que rompe con los tópicos y nos lleva por unos derroteros nunca antes vistos. No solo es atrayente el modus operandi que lleva a cabo el anónimo psicópata para torturar y finalmente matar a sus víctimas, sino la narración en sí, que alterna los hechos presentes con el diario en primera persona de la infancia del asesino, historia esta última que funciona como complemento perfecto para entender los recovecos de la mente del antagonista, además de tejer un hilo que conectará con la actualidad. Una carrera a contrarreloj sembrada de pistas que conducirán a Sam Porter y su equipo por toda la ciudad de Chicago con el objeto de salvar a la que puede ser la última víctima de El Cuarto Mono, un asesino que, al estilo de Kevin Spacey en Seven, nos hará empatizar con él y deleitarnos con su razón de ser, obligándonos a posicionarnos en un lado u otro de la línea. Una lectura obligada que tiene como única pega que no es autoconclusivo, con la continuación pendiente de publicación. Por lo demás, de lo mejor que se puede regalar a la vista de este género. Fluido, adictivo y original. Así es El Cuarto Mono. Y recuerda…. “No hagas el mal”. (David Carrasco, 16 de julio de 2018)
hace 6 años