Otra manida historia sobre la inmigración y sus dificultades. Miguel Gane pone mucha voluntad, pero su narración se queda blanda y un tanto corta. Bajo la mirada de un niño rumano -que bien pudiera haber sido él-; expone la dramática situación del ilegal o del que es de fuera. De la lucha diaria por encontrar la oportunidad que no te da tu patria o tu propia tierra. Lo dicho: Está escrita con muy buena intención, pero al final se queda muy en la superficie.
hace 4 años