Palmira Canadell, una muchacha del barrio del Raval, ha sido violada y asesinada por tres individuos. El inspector Méndez, policía de la vieja escuela marginado por los suyos, inicia una investigación no autorizada sobre el crimen, conmovido por la indefensión de la madre y de la hermana gemela de la difunta. Muy pronto aparece otro cadáver, el de uno de los violadores, y los hechos empiezan a sucederse sin darnos respiro, vinculando a toda una serie de personajes –sospechosos habituales, mujeres solidarias, presuntos inocentes—que van conformando la trama de esta brillante novela de uno de los maestros del género negro español, Francisco González Ledesma.