VIAJE AL FIN DE LA NOCHE

VIAJE AL FIN DE LA NOCHE CELINE, LOUIS-FERDINAND

Portada de VIAJE AL FIN DE LA NOCHE
Nota media 8,13 Muy bueno 90 votos 16 críticas

Resumen

Con Viaje al fin de la noche, Céline se situó en una posición de privilegio en las letras francesas, de la que ninguna consideración extraliteraria lograría desbancarlo. La prosa amarga y quebradiza de Céline, su característico ritmo acelerado, el lirismos descarnado con que construyó a sus personajes o la altiva mueca con que contempló la existencia son claves indispensables para comprender la literatura europea y latinoamericana actual.

16 Críticas de los lectores

9

Una novela de las grandes. Con un estilo muy particular, al principio puede resultar difícil de digerir por el exceso en el uso de los signos de puntuación, pero al poco acabas entrando de lleno en la historia y en la mente del protagonista. A través de él, Céline retrata magistralmente los escenarios y ambientes sociales de la época y las huellas que la guerra deja en el ser humano. Reflexiona profundamente sobre temas como la muerte, la amistad, el amor, la traición, todo ello siempre desde el pesimismo existencial en el que se encuentra hundido el protagonista y con suma elegancia. Es cierto que el personaje tiene ciertas actitudes y opiniones misóginas (lo que para muchos es una extensión de la personalidad del propio autor dado el marcado carácter autobiográfico de la obra) pero no ello no desmerece su calidad literaria. Es una obra que merece ser leída y releída.

hace 1 año
7

Muy interesante, pero la traducción es sólo para leer en España. No tienen en cuenta a otros lectores de habla hispana. Los modismos los han "españolizado". Por otra parte, en cuanto a la novela, siento cierta desazón. Esperaba más, teniendo en cuenta los elogios de la critica desde hace décadas.

hace 3 años

Novela recomendable, con grandes virtudes y numerosos defectos. La he leído en una edición plagada de erratas y con mala traducción, la edición de Seix Barral. Tiene un lenguaje muy vivo y expresivo, lleno de fuerza, y, a medida que va narrando docenas de sucesos, intercala reflexiones sobre el ser humano, el sentido de la vida, el amor, la muerte... En fin, lo de siempre, unas reflexiones muy interesantes, y al tiempo muy discutibles. La negatividad del autor, su repugnancia por el ser humano y por la vida es tan exagerada que resulta ridícula, como de adolescente furioso y rebelde porque ha descubierto que el mundo no es el cuento de hadas que le contó amatxu cuando era un niño. Además, muchas frases son poco coherentes o muy ambiguas, y el lector apenas consigue intuir a qué se refiere. El único hilo argumental que "estructura" (dicho sea con mucho optimismo) la sucesión de batallitas de todo tipo es la repugnancia por el ser humano y el empeño en presentar las vida como una sucesión de horrores absurdos protagonizados por unos seres despreciables, excepción hecha de un personaje llamado Molly. Aun así, se lee con mucho interés dada su fuerza expresiva, que hace al lector sentir con viveza las situaciones y reflexionar sobre muchísimos temas de la vida, sea bien para coincidir con el autor, sea para considerarlo maniqueo, simplista e infantil. Porque, de hecho, lo es. No nos engañemos: los artistas tienen una maravillosa fuerza para transmitirnos sus sentimientos y opiniones, pero, en general, son unos zotes para entender la realidad con acierto y ecuanimidad. Eso si: captan muchas cosas que los demás no hemos visto o apenas hemos intuido.Pero no soportan que la vida sea como es en realidad: ni una mierda, ni una maravilla. Eso no encaja con sus espíritus exaltados.

hace 4 años
10

Probablemente la mejor novela que se haya escrito en el siglo XX, no hay otra que retrate mejor la locura autodestructiva y delirante de su primera mitad. La gran guerra, el colonialismo, el sueño americano... y un sentimiento de hastío que todo lo envuelve. Céline fue un gigante de las letras, que empequeñece a todos los existencialistas franceses surgidos años después de la publicación de esta novela colosal y deja a sus vanos intentos por explicar su tiempo reducidos a mera charlatanería. En "Viaje al fin de la noche" está todo lo que se necesita saber sobre esa época, narrado de forma cruda y llana, descrito por alguien que lo vivió en sus mazmorras y sus alcantarillas, no por quien lo interpreta junto a otros intelectuales desde la terraza de un café parisino...

hace 5 años
8

Me resulto muy agradable de leer .Aunque en algunas partes sobre todo pasando la mitad del libro se me hizo algo molesto el hecho de no encontrar un hilo conductor entre las diferentes etapas de la vida del protagonista. Y al empezar una nueva historia , perdia un poco la atencion , pero una vez que se presentaban nuevas situaciones y personajes , el libro volvia a captar completamente mi atencion. En cierto punto mientras lo leia , recorde el libro Viajero Solitario de Kerouac. Creo que aquellos a los que le guste jack kerouac , como a mi , disfrutan seguramente de esta novela.

hace 6 años
10

Brutal. El lector de Viaje al fin de la noche experimenta una invasión irrefrenable de talento e imaginación, una sacudida violenta en su conciencia y un deleite propio de otras experiencias.

hace 7 años
2

Es el primer libro desde que aprendí a leer que no se sido capaz de terminar y que tuve que abandonar tras haber leído apenas 100 páginas. Simplemente no lo entiendo. Me parece absurdo, sin trama, sin hilo conductor salvo los exabruptos de su autor. Quizá algún día le dé una segunda oportunidad pero ese día todavía está muy lejos. No me gusta perder el tempo leyendo.

hace 7 años
6

El libro resulta interesante por los distintos pasajes que atraviesa: La Primera Guerra Mundial, el colonialismo en África, el capitalismo en EUA y, finalmente, vuelta a los suburbios de París. Destaca por un lenguaje soez y especialmente gracioso en algunos diálogos. Sin embargo, la narración se estanca en ciertos fragmentos, se hace un poco cansino y se echa de menos un hilo conductor más allá del eterno reencuentro con Robinson.

hace 8 años
10

VERDADERO "ULISES" DEL S. XX ESE ÁLTER EGO DE CÉLINE, DE LA GRAN GUERRA PASA A LAS COLONIAS FRANCESAS EN ÁFRICA, DONDE VIVE EL HORROR CONRADIANO, Y DE ALLÍ A LA AMÉRICA DEL TAYLORISMO, PARA RETORNAR AL PARÍS ARRABALERO; AUNQUE EL ENEMIGO CONTINÚAN SIENDO UNAS INSTITUCIONES QUE NOS REDUCEN A NÚMERO. MEDIANTE UN LENGUAJE PLÁSTICO EN QUE ALTERNAN RETÓRICA Y CHABACANADA AL MODO DE PETRONIO, EL NIHILISMO IMPERANTE ENCUENTRA SU CONTRAPESO EN ECOS DEL MORDAZ RABELAIS, POR EL TALANTE CON QUE EL PROTAGONISTA SE AVENTURA, AUN FRÍO DE CRITERIO, Y SU "PANURGO" VA TRAMPEANDO.

hace 8 años
10

Las primeras trescientas páginas son geniales. Rápido y contundente. A partir de ahí se centra en una historia y es todo más lento, pero igualmente genial. El lenguaje es coloquial, mucha jerga, vulgar en ocasiones, aunque también culto. Una mezcla original, un libro diferente. La miseria humana que muestra se hace soportable por su humor negro. Un «viaje» espectacular.

hace 9 años
10

El título fue lo primero que me sedujo. Me sedujo la propuesta de viajar al fin de la noche. Después fue su primera página la que me cautivó, su primer capítulo, el lenguaje directo, actual, atractivo, cotidiano con el que narra la historia de un héroe sin vocación de serlo. Un héroe en su constante búsqueda de un resquicio por donde escapar de la muerte, de la muerte absurda que nos reportan todas las guerras. Un héroe que reivindica el derecho a la cobardía, siempre atrapado en la irremisible atracción por la belleza femenina, el miedo es más natural en el hombre que la valentía desmesurada es una de las conclusiones que nos aporta esta magnífica novela. Ha sido una gratificante sorpresa su lectura. Gratificante y placentera merecedora de la máxima puntuación.

hace 10 años
6

La historia sigue las andanzas del narrador-protagonista, quien realiza una serie de reflexiones que lo colocan en la línea de la gran narrativa del siglo XX. La historia se reparte entre Europa durante la Guerra, la África colonialista, EE.UU. y nuevamente Europa, en París. A lo largo de su periplo vital, el personaje vive, en cierta manera, disociado: su comportamiento le lleva a actuar de una forma que no parece corresponder con su visión del mundo, ácida, crítica, desencantada, cínica, misántropa y misógina. Mientras que el personaje no parece tener ningún control sobre su vida (especialmente en su relación con un amigo que sólo le trae complicaciones), y ante los demás parece una persona sin voluntad, un tanto ingenuo y de carácter apocado e influenciable, su vida interior produce una sensación de fuerte contraste en la claridad con la que desprecia el mundo y la sociedad que le rodean. Ese contraste también se aprecia en el lenguaje utilizado: tiene un estilo muy retórico y en ocasiones difícil de leer, en el que a menudo destacan expresiones vulgares que rompen con la homogeneidad de la novela. En conclusión, se trata de una novela compleja, con un protagonista lúcido y omnipresente pero a menudo antipático, con una filosofía vital que invita a la reflexión y con un desarrollo que a veces se antoja irregular, aunque mejora según va avanzando.

hace 13 años
10

Muy buen libro, con un buen trama aunque por momentos un poco pesado de seguir, aprox hacia el tercio final se suelta mejor y te mete de lleno hasta terminarlo. Lo terminé de leer y me dejó reflexionando mucho tiempo como ningún otro libro, sobretodo acerca de la parte final. Lo recomiendo y se puede aprender mucho de esta lectura, acerca de la condición humana frente a las tragedias.

hace 13 años
7

A mí me ha resultado un libro extraño y difícil de leer, pero sin duda muy interesante. Tiene varias partes diferenciadas, que no parecen pertencer a la misma historia, desde un principio intenso y antibelicista durante la guerra a una parte que transcurre en África y que recuerda claramente a "El corazón de las tinieblas" de Joseph Conrad, con ese personaje misterioso y fascinante como Kurtz, para pasar después a sus aventuras en Estados Unidos que me recuerdan las del protagonista de "América" de Kafka. Y desde ahí se convierte en un libro diferente, una vez que volvemos a sus aventuras como médico en Francia, reencontrándose una y otra vez con el mismo personaje, un amigo fascinante que una y otra vez le complica la vida pero al que no puede renunciar. Desde mi punto de vista el libro respira una fuerte misoginia, pues no aparece ningún persanaje femenino al que no dedique algún insulto, y respecto al estilo narrativo y las reflexiones internas y constantes del protagonista me recuerda al "Ulises" de James Joyce, aunque sin duda resulta bastante más fácil de entender.

hace 13 años
6

El libro tiene un arranque excelente, y la primera parte es magnífica, con una ironía exquisita. Pero si tuviera que calificarlo con un adjetivo, diría que es ante todo un libro "irregular" y, de hecho, en la segunda parte decayó totalmente mi interés. Pero lo cierto es que mientras leía el primer tercio del libro, tenía la convicción de estar leyendo un libro único, sorprendentemente bueno.

hace 13 años

Muy bueno, me encanta.

hace 15 años