No me parece de lo mejor de Shakespeare, los enredos son más propios de una comedia de adolescentes que de una tragedia barroca. El protagonista aparece en primer lugar descrito como un hombre inteligente y seguro de sí mismo y acaba resultando un ser celosos, desconfiado y fácilmente manipulable. Le doy el aprobado raspado porque la narrativa y los diálogos son propios de un genio de la literatura pero el argumento deja mucho que desear.
hace 3 años