Resumen

Un padre y sus dos hijos salen a pescar un día en el que se anuncia la tormenta. Mientras en el mar la pesca abundante llena de muerte la lancha y convoca la tragedia, en la costa se ha quedado la madre, la «loca venteada» perseguida por las múltiples voces que le hablan al oído casi siempre para mal, acechada por aquellos que tratan de atajarle la locura, acompañada, de vez en cuando, por alguno de los turistas que intenta aliviarle el desvarío.

Los mellizos, Mario y Javier, están a punto de no saber cómo lidiar con el odio que sienten por su padre. Lo han visto construir a pulso el hotel de cabañas en el que trabajan en medio del opulento paisaje del mar Caribe, pero también han soportado la arrogancia devastadora de un hombre que nunca ha sabido cómo quererlos, y han tenido que aceptar el abandono al que ha sometido a su madre que, poco a poco y mermada por el desamor, ha ido perdiendo la razón.

No hay nada más brutal que la traición de la propia sangre. Los hijos viven entre la aflicción y el resentimiento, y el padre en algún momento teme por la creciente amenaza del rencor que ha cultivado casi sin saberlo, y que se amplifica gracias a la inmensa soledad del mar. Tomás González desciende en esta nueva novela a lo más profundo del ser humano, donde por lo general todo suele ser oscuridad, y sin embargo su retrato es tan compasivo y lúcido como en el resto de su obra. Temporal es la contracara de su celebrada novela La luz difícil: el odio, como el amor filial, es implacable.