ESTE DIFUNTO SEÑOR (D.E.P.) NO PUDO SER CRÍTICO IMPARCIAL PORQUE HUBIESE TENIDO QUE CLAUSURAR ANTES SU LIBRERÍA. ENCUMBRA A QUIEN VOMITÓ QUE MARLOWE ES «BASURA», JAMES ELLROY, UN ENAJENADO SANGRIENTO QUE ENCAJA SUBTRAMAS DESCOSIDAS A BASE DE JERGAS HAMPESCAS Y CON SEQUEDADES POR DIÁLOGO ENTRE CONFUSOS PERSONAJES. COLOCA EN EL MISMO PODIO QUE A HAMMETT Y CHANDLER AL NECRÓFILO J. THOMPSON, EN CUYAS NOVELAS ESTILA UN SARCASMO MORBOSO SOBRE LOS NECIOS Y LAS ARPÍAS QUE PULULAN. RECORDAR EL LIBRERO DEL IMAGINARIO MARTIN BECK QUE «LAS NOVELAS DE MISTERIO INGLESAS» SON «ARTIFICIOSAS Y POCO REALISTAS» NO LE ES ÓBICE PARA RECOMENDAR A AGATHA CHRISTIE, ALGUNAS DE CUYAS OBRAS MÁS ACLAMADAS SEMEJAN ACERTIJOS DE TITEREROS. HE LEÍDO «DIEZ NEGRITOS» Y «EL ASESINATO DE ROGER ACKROYD», Y NO LE LLEGA A LA SUELA DEL ZAPATO A LA PATRICIA HIGHSMITH DE «EL TEMBLOR DE LA FALSIFICACIÓN» Y «MAR DE FONDO». EL DISLOQUE ES ATREVERSE A EQUIPARAR CON EL ESTILISTA SUPERDOTADO CHANDLER A ROSS MACDONALD, QUIEN, COMO ATINADO SEÑALÓ PERICH, «ESCRIBIÓ SIEMPRE LA MISMA NOVELA» (SIN PODER COMPETIR AL FIN CON SU MUJER, MARGARET MILLAR, AÑADO), PUES LO PONDERAN ESCRITORES DE SEGUNDA: JOHN CONNOLLY, DELIRANTE FANTASMAGÓRICO; P. D. JAMES, RETRATISTA FLEMÁTICA DE ESPACIOS CERRADOS SUJETOS A LA INACCIÓN; PELECANOS, DEUDOR DEL RUDÍSIMO PECKINPAH, Y DONNA LEON, CREADORA DEL INSOSTENIBLE POLICÍA BRUNETTI CUYA PRODUCCIÓN HA IDO EN IRREPARABLE DECLIVE.