Misterio o Suspense: dos palabras que estremecen. Un juego entre los escritores y los lectores, asumiendo todos ellos una complicidad en beneficio de una transformación de la realidad para que las emociones humanas terminen por estremecer. Todo un desafío para quienes disponen de unos nervios templados.Si Edgar Wallace nos propone con El Romney robado una intriga policial, donde la emoción viene dada por la misteriosa desaparición de una valiosa pintura, en El asesinato de 841 Mesías, Guillaume Apollinaire, nos lleva a un mundo donde un astuto criminal se aprovecha del sueño de todo un pueblo para convertirse en el «Rey de Judea». Juegos creativos para recreo de las mentes más inquietas. Porque a los demás autores, entre los que podemos destacara los geniales Franz Kafka y Antón Chéjov parece moverles la misma intención. Tampoco nos hemos olvidado de la literatura popular al incluir Los crímenes del museo, de Manuel Yáñez, y El sioux Tatanka Yotanka, de Carter Scott. Dos muestras del mejor género de Misterio, con sus dosis de suspense, siguiendo los patrones más clásicos. También merece ser destacado Guy de Maupassant, ya que su obra La mano es considerada uno de los mejores relatos del genero, la fuente en la que han bebido muchos otros autores. No nos hemos olvidado del romanticismo más desesperado, gracias a Vera, de Villiers de I’sle-Adam, ni de la amenaza invisible capaz de destruir al más honesto de los seres humanos, mientras los demás consideran que lo sucedido es una locura...Como veréis, os ofrecemos las emociones mas intensas. Un tobogán para quienes no conocen el vértigo... ¿Te atreves a comprobarlo?