Leer un libro que se titula "Muertes ilustres de la humanidad" y no poder evitar desternillarse de risa puede dar que pensar. El caso es que, una vez más, Nieves Concostrina me ha vuelto a enganchar a la historia, aunque, eso sí, a costa de la muerte. «La muerte es interesante, pero hay que vivir la vida», dice Nieves a modo de epitafio. Amén.
hace 12 años