La obra es muy buena, es acongojante la venganza de Medea, hasta donde se puede llegar cuando el odio apasionado aniquila el razonamiento y los sentimientos humanos, un odio tan desatado que conduce a sacrificar la propia felicidad y el propio bienestar, todo por satisfacer una maldita venganza. Me ha hecho pensar en los asesinatos por violencia de género actuales, claro que la inmensa mayoría los cometen los hombres contra las mujeres y en esta obra es al revés, pero en el fondo es el mismo sentimiento, los asesinos de hoy en día tienen mucho que ver con Medea.
hace 6 años