Año 1505, Teresa de Jesús escribe, en su madurez, animada por su confesor. Es mujer culta y piensa, todo un peligro para la Inquisición. Pero lo que escribe aquí es secreto, no verá nunca la luz. Lo que destaca primero de todo es la prosa, rica, imitando al castellano antiguo, pero a la vez sencilla para que el lector pueda leer sin problemas. Otro aspecto a destacar es el sentido del humor que impregna muchas de sus páginas. Y magistral es la psicología con que la autora nos retrata a Teresa de Jesús, una mujer que lucha constantemente contra su soberbia y vanidad (su ego), que rechaza el patriarcado, ese dominio del macho del que ella quiso escapar, y del que fue víctima su madre, que murió su décimo parto. En su camino, se cruza con una sorprendente y carismática hermana, que la lleva a replantearse muchas de sus convicciones. En resumen, leemos lo que posiblemente pensó Teresa y que no tuvo más remedio que callarse, y más que una santa, encontramos a una feminista, a una rebelde, que de haber dicho realmente lo que pensaba quizá lo hubiera pagado con el tormento. Fascinante, me ha encantado.
hace 4 años