Los pecados capitales y sus virtudes están dentro de cada uno de nosotros, con las luces que encienden y las sombras que arrojan. Son parte de la condición humana y se manifiestan en la cotidianeidad de una u otra manera, llegan sin avisar, como un accidente ¿No lo crees así? ¿No cometiste ningún 'pecadillo' en alguna ocasión? Pues quien esté libre de pecado que lance la primera piedra, ... ¡Espera, espera! No la tires todavía, puedes lastimar a alguien si le das con eso en la cabeza, ... ¿De verdad? ¿Ni un solo pecado, nunca? Entonces empatía, por favor, o no vamos a ganar para chichoneras. La empatía es fundamental para alcanzar la felicidad plena, el amor universal, y aquí hemos venido a eso, a ser felices y a disfrutar lo máximo posible durante la búsqueda constante de ese noble sentimiento, la FELICIDAD.