La anciana Grace Spivey cree que el pequeño de seis años Joey Scavello es el Anticisto, y pone a todos sus secuaces tras su pista para matarlo. Su madre, Chistine, contrata los servicios de Charlie Harrison para que los proteja, pero Grace tiene poderes que subyugan a sus adeptos y todos darán la vida por ella. Chistine y Joey se dedican a huir de las garras de la muerte para, al final, tener dudas que les atormentan.