Premio Booker 2001. En un alarde asombroso del arte del ventrílocuo, Carey da vida al mítico bandolero australiano Ned Kelly, al huérfano, Edipo, ladrón de caballos, granjero, asaltador de bancos, asesino de tres policías y, finalmente, el Robin Hood de Australia, en una voz tan original y llena de pasión que parece que el mismísimo Kelly nos hable desde la ultratumba.