Helen, que vive en Melbourne, prepara la habitación de invitados para su amiga Nicola, que pasará con ella unos días mientras se somete a un tratamiento de medicina alternativa. La rutina de la anfitriona se verá truncada, y un sinfín de sentimientos contradictorios sobre la enfermedad y el tratamiento de su amiga la afectarán sustancialmente. La relación y diálogos entre las dos mujeres, sesentonas, maduras e independientes, es el hilo principal de esta novela, sencilla, pero muy bonita y conmovedora. Narrada en primera persona, su lectura aborda muchos temas: las enfermedades terminales, los tratamientos alternativos, la amistad, el auto engaño, los límites de la generosidad… Como única pega, quizá el final precipitado de la novela. De todos modos, me ha gustado mucho y en mi opinión es una lectura muy recomendable.
hace 1 mes