El libro sirve como fuente de información para datos objetivos sobre el reparto de recursos (hombres, armas, territorio, medios de producción) habido al principio de la guerra y a lo largo de la misma (armas importadas, compradas, recibidas, etc). Así mismo (y por esa razón me decidí a comprarlo) tiene una serie de mapas de gran valor para comprender la evolución de la contienda. Además hace una explicación sucinta, pero eficaz, de las principales ofensivas y contraofensivas, y de las fases básicas de la guerra. La tesis fundamental que sostiene el libro es que la República contó con medios suficientes (tierra, mar, aire, financieros, industriales, etc) para ganar la guerra, pero no supo, o no pudo, o no quiso usarlos, sea por sorpresa, desconcierto, desorganización interna, falta de mando unificado, diferencias internas, sectarismo o falta de pragmatismo. El bando sublevado supo aprovechar mejor sus bazas haciendo justamente lo contrario. Aspectos criticables, en mi modesta opinión: el estilo me resultó antipático (exceso de puntos suspensivos, y por momentos una innecesaria solemnidad). El autor no toma partido político nunca (lo cual, desde mi punto de vista, ya es tomar partido). Las conclusiones a las que llega son casi las mismas a las que llegó en su día Vicente Rojo (él mismo lo reconoce). Hecho en falta mejor sistema de notas a pie de página, y una lista final de libros. Por último, hago notar que, salvo que me haya despistado, el historiador Paul Preston no se menciona ni una sola vez, ni siquiera para contradecirlo. Ahí lo dejo.
hace 3 meses