Este libro es una seria contribución a la superación del abismo de incomprensión mutua entre la cultura científica y la humanística, que fue abriendo el proceso moderno de profesionalización y especialización del saber. En él se reinterpreta la filosofía de Kant y su programa trascendental a la luz de una idea como la de epigénesis, extraída por el filósofo de Königsberg del campo de la embriología para elevarla a rango filosófico y dar cuenta de la naturaleza toda, incluidas, por supuesto, la mente y sus cualidades cognitivas. En este sentido, Kant y las ciencias de la vida puede ser leído como la continuación de un amplio y novedoso proyecto de naturalizar el trascendentalismo kantiano emprendido por el autor, un proyecto que tuvo su primera entrega en otro libro publicado en esta misma colección: ¿Naturalizar a Kant? Criticismo y modularidad de la mente (2003).