La filósofa Lectrice Santos es expulsada de la universidad tras atreverse a dictar una conferencia sobre el placer y la censura. Su único crimen: desafiar a sus alumnas a pensar por qué la novela más polémica de la literatura contemporánea ha desaparecido de todas las bibliotecas del mundo. Invitada a participar en un seminario sobre literatura y erotismo, hastiada de la Academia y agobiada por los fantasmas de su pasado, Santos reivindica la importancia de leer y releer clásicos como Lolita, de Vladimir Nabokov, sin dejarnos arrastrar por los prejuicios del presente. Así, lo que comienza como una clase magistral sobre la vida y obra del escritor ruso, se transforma en un acto de resistencia contra la amnesia ideológica que amenaza con borrar las obras incómodas de la historia.