Barcelona, principios del siglo XXI. La ciudad, tras la subida del nivel del mar provocada por la fusión de los polos terráqueos, es ahora un inmenso cenagal anárquico poblado por pervertidos, traficantes, gurús alternativos y toda la escoria que dejó atrás el éxodo posterior a su anegamiento. El hogar ideal para Aitor Estebowsky, un detective homosexual, decrépito, adicto a las drogas, el alcohol y el sexo. Expulsado con deshonor de La Compañía, la mayor organización de contraespionaje mundial, el detective consume sus días entre la desesperante falta de clientes y sus devaneos por RealKonsens, un simulador social on-line en forma de realidad alternativa no mucho más agradable que la realidad formal. Cuando Aitor reciba la visita del coronel Pascual El Lagarto Larraz, quien trae consigo un encargo imposible de rechazar: La Compañía ha perdido en Barcelona la pista a algo llamado «El Demótico» un artefacto neurolingüístico extraterrestre que puede ser la última esperanza de la humanidad de salir de este planeta Tierra condenado a muerte. Y el ex-operativo de campo Estebowsky, por sus contactos y sus peculiares inclinaciones, es el único cualificado para encontrarlo. Poco se imagina el malogrado héroe accidental, sin embargo, que en sus pesquisa se verá obligado a enfrentarse a ejércitos ninja, fantasmas del pasado, muertos vivientes lotófagos, villanos de serie B y conspiraciones dentro de conspiraciones dentro de conspiraciones capaces de volver del revés la cordura de cualquiera.