Cuando las letras hierven de sentimientos, suspiros y certezas, la mente las moldea, y una de sus formas son los aforismos. A través del tiempo y en distintas civilizaciones las citas célebres han mostrado vivencias aportando la manera de explicar el mundo de cada autor. No son momentos fáciles, mucho menos para el arte, y esta sociedad nos marca una velocidad deshumanizada, obligándonos a consumir productos culturales con rapidez. Pero esta obra necesita pausas para paladear cada frase y asumirla como propia. Este librito encierra un saber prácticamente atemporal y universal, además de la vida que transmite en cada letra y la cordura de cada línea. Alberto Pérez no marca pautas de comportamiento sino que aporta una visión muy lúcida de su forma de entender todo lo que ocurre, y de lo que ocurre por no entender, todo lo que sucede alrededor. Y de vez en cuando, viene bien una bofetada de cruda realidad o de realidad desnuda, junto a una caricia, que nos recuerde por qué estamos aquí.