Después de cinco años esperando una nueva novela de Herman Koch, quien me atrapó con “La cena” y “Casa de verano con piscina” por fin llegó a mis manos su último libro “Estimado señor M”, un puzzle psicológico que comienza con un inquietante narrador anónimo que se dedica a espiar y a interactuar desde la distancia con un vecino, a quien al parecer desprecia. Este vecino, a quien el narrador (uno de los principales protagonistas de la trama) denomina “señor M” resulta ser un escritor de renombre, cínico y vanidoso, con quien nuestro misterioso personaje parece estar obsesionado y de quien conoce al dedillo no sólo todos sus pasos sino también toda su obra. Escrita sin dar tregua al lector, con la crítica social que le caracteriza y unos personajes que el autor desmenuza y retrata a la perfección, se trata de una novela compleja en la que a través de varias voces narrativas con referencias al presente, pasado y posible futuro, vamos descubriendo una “novela dentro de la novela” que si bien en su parte central me resultó un poco tediosa, se encarrila una vez que la maraña en que Koch nos sumerge se va desentrañando y conocemos por fin la identidad del narrador y el porqué de su inquina hacia el escritor, hasta llegar a un final inesperado que nos deja pensando hasta qué punto perverso pueden llegar ciertas personas con tal de conseguir el triunfo.
hace 8 años