Atenas, siglo V a.C. Isómaco es un respetado ciudadano ateniense que, movido por su admiración hacia las ideas de hombres como Sócrates, Anaxágoras y Heródoto, participa en la Asamblea y en los asuntos públicos de su ciudad en defensa de Pericles. Cuando compra al esclavo Neleo para ejercer como pedagogo de su hijo Iónides, ignora que ha puesto en funcionamiento la implacable rueda del destino y que su mundo, al igual que el de toda la Hélade, cambiará para siempre. ¿Cuál es la relación entre el misterioso asesinato ocurrido en la apacible hacienda familiar y Alcinoo, un espartano que atenta contra los fundamentos de la democracia y la justicia de la polis? Una ira ciega se apodera de Isómaco, quien acude al dios de Delfos en busca de ayuda para llevar a cabo su venganza. El joven Iónidas, lúcido testigo del combate entre el odio y la razón, recibirá una enseñanza que marcará toda su vida.
Antonio Penadés ha escrito una historia formidable que es al mismo tiempo una tragedia griega, una novela histórica y una novela de ideas. Isómaco y Alcinoo encarnan el gradual enfrentamiento entre Atenas y Esparta, y la transformación del protagonista refleja vívidamente el esplendor, la crisis y la caída de toda la Grecia clásica.